1. ¿Qué no se puede llevar en el equipaje?
Está prohibido llevar explosivos y sustancias inflamables en el equipaje de mano y de bodega. Estos incluyen sopletes de gas y petardos, entre otros.
Por motivos de seguridad, no podrás llevar en tu equipaje elementos de punta afilada, por ejemplo, tijeras con extremos en punta, bisturís, sacacorchos, pinzas, etc.
Las normas más estrictas se aplican a los líquidos. No podrás llevar en el equipaje de mano más de 10 botellas de 100 ml cada una, guardadas en una bolsa transparente. A los límites descritos, se aplican dos excepciones: transporte de alimentos lácteos para bebés y medicamentos, de estos últimos podrás llevar la cantidad que sea necesaria durante el viaje.
2. Hacer las maletas es un verdadero arte
Cada aerolínea tiene sus propios requisitos con respecto al tamaño y al peso permitidos en el equipaje de mano y de bodega. Es importante no sobrepasar estas restricciones porque, de lo contrario, tendrás que pagar un valor adicional por exceso de equipaje en el aeropuerto.
La mayoría de las compañías aéreas permite llevar en cabina, además del equipaje de mano, una segunda bolsa más pequeña que puede ser una cartera o un maletín para el portátil.
El equipaje facturado recorrerá un largo camino hasta llegar a tus manos de nuevo, por lo que es importante que hagas la maleta de tal forma que no se dañe o rompa ningún elemento frágil.
3. Prepárate para el check-in
En el aeropuerto no solo revisarán tu equipaje, sino que también te harán un control a ti antes de pasar a la sala de embarque. Cuando llegue tu turno, deberás tomar una cesta justo antes de la cinta de escáner y poner allí todas las pertenencias que llevas en los bolsillos. Si es necesario, también deberás quitarte la chaqueta o el jersey, la bufanda, el cinturón del pantalón, etc.
Después, tus artículos pasarán por el escáner a través de la cinta, y tú deberás pasar por la puerta de control, además, pueden llegar a pedirte que te quites los zapatos.
4. Cada país tiene sus propias reglas
El transporte de alimentos, por ejemplo, no lo prohíbe ninguna compañía aérea. Sin embargo, deben cumplirse algunas reglas dependiendo de la empresa, del destino y de la cantidad de alimentos. Algunos países, como EE. UU. o Australia, prohíben la entrada de alimentos frescos en su territorio.
Por otro lado, en el territorio de la Unión Europea está prohibida la entrada de alimentos, leche, carne y productos de origen animal procedentes de países de fuera de la Comunidad Europea.
Por tanto, te recomendamos que revises el reglamento del país de destino y de los países de tránsito.
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5. Usa ropa adecuada para viajar en avión
Parece trivial, pero vale la pena prestar atención a tu atuendo. Cuanto más largo sea el viaje, más podrás percibir los efectos de llevar ropa inadecuada.
Lo más importante es asegurarse de que no apriete o incomode. Incluso si viajas durante el verano, vístete de tal forma que puedas quitarte los calcetines y la ropa de abrigo. El aire acondicionado del avión te mantendrá fresco.
6. Teléfono solo en modo de vuelo
A pesar de que cada vez hay más y más información que asegura que los teléfonos móviles no interfieren con el buen funcionamiento de las aeronaves, la mayoría de las aerolíneas prohíben su uso durante el vuelo. Únicamente está permitido usarlos en "modo avión".
Algunos aviones permiten a los pasajeros usar la red wifi a bordo. Sin embargo, generalmente es un servicio por el que hay que pagar.
7. Puedes comer en el avión
Es un mito que no puedas comer durante el vuelo. De hecho, si vas a hacer un viaje largo y no compras comida para llevar a bordo, pasarás hambre. Lleva pequeños bocadillos o apetitivos que no huelan demasiado ni dejen restos.
Únicamente se aplican restricciones a la bebida. Para evitar que te la quiten, compra una bebida en la sala de embarque después de haber pasado el control.
La comida de los niños es un tema completamente diferente. Los padres o responsables pueden llevar leche u otros alimentos en el caso de que viajen con bebés. Durante el control, se deben mostrar por separado. En la mayoría de los aviones es posible calentar los alimentos en el microondas.
8. Los dulces no son solo para niños
Durante el despegue y el aterrizaje, los cambios de presión hacen que se taponen los oídos. Si, además, te da moqueo nasal, puedes llegar a tener una sensación bastante desagradable. Pero no te preocupes, hay varias maneras de tratar con este problema.
Intenta masticar chicle o chupar un caramelo. Esto debería aliviar los síntomas.
Prepárate para viajar, toma una siesta antes del vuelo, una comida ligera y trata de encontrar algo divertido que te mantenga distraído. Puede ser un libro, tu música favorita o una película.
9. Los niños pueden aburrirse
Incluso si son los mayores entusiastas de la aviación, los niños pueden llegar a aburrirse después de pasar un largo tiempo a bordo, así que vale la pena estar preparado para este momento. Si no puedes llevar sus juguetes favoritos, asegúrate de que haya suficientes lápices de colores y unas cuantas hojas de papel. Puedes pedirle al niño que haga un informe de su viaje (cómo es el avión, el aeropuerto, el paisaje, etc.).
Otra cosa que puedes hacer es recurrir a juegos de palabras que no requieran ningún objeto físico, como piedra, papel o tijera, palabras encadenadas, etc. También puede jugar a adivinar por qué lugares se está pasando o a qué se parecen las nubes según su forma.
10. Puedes visitar la cabina del piloto
El piloto deberá estar de acuerdo. Lo ideal es preguntar antes de que comience el vuelo ya que, después, los pilotos tendrán un montón de trabajo y estarán ocupados. Si no hay retrasos y la tripulación no lleva prisa, probablemente, el capitán te dará un recorrido por la cabina.
Algunas aerolíneas tienen programas especiales de fidelidad para los niños en los que se otorgan puntos que dan derecho a los pasajeros jóvenes a explorar la cabina.